¿Y si tengo Fibromialgia?

Hoy he querido escribir un artículo para dar a conocer un problema de salud cada vez más frecuente en nuestra sociedad. Dedico estas palabras a todas aquellas mujeres y hombres que sufren a menudo en un doloroso silencio esta enfermedad, causante en muchas ocasiones de un alto sufrimiento físico y emocional.  

¿Qué es la fibromialgia (FM)?

Es una enfermedad crónica caracterizada por dolor músculo-esquelético generalizado e hipersensibilidad a la presión. Suele cursar con gran variedad de síntomas como fatiga persistente, parestesias en pies y manos, sueño no reparador y rigidez generalizada.  La literatura científica aporta evidencias respecto a los niveles mayores de ansiedad y depresión en pacientes con FM en comparación con poblaciones “sanas”.

Prevalencia

Según el estudio EPISER, en España el porcentaje de afectados se sitúa en el 2,4% de la población general, siendo entre 6 y 8 veces más frecuente en mujeres. La edad de aparición es amplio: entre los 20 y 55 años.

¿Cuáles son sus causas?

La ciencia a día de hoy no ha podido establecer una causa clara y definida, por ese motivo a veces se la ha llegado a considerar una “falsa” enfermedad. Numerosas investigaciones indican entre otras causas disfunciones neurológicas, alteraciones neuroquímicas, factores psicológicos, alteración de la temperatura corporal, deterioro de la microbiota intestinal, etc.

De todas las posibles teorías explicativas sobre la etiología en FM me gustaría centrarme en dos:

(1). La teoría de la Red Neural por Defecto (RND). En un artículo anterior hable sobre esta red. Si la RND se hiperactiva por verse sometida a demasiados estímulos estresores y los denominados procesos de “rumiación” mental, se favorece la desregulación del Sistema Nervioso, favoreciendo los estados de ansiedad, nerviosismo, insomnio, etc. Estudios muy recientes has encontrado una relación directa entre la RND y FM.

(2) La teoría del síndrome miofascial (SMF). Sin entrar en términos técnicos se podría definir al SMF como una dificultad en la capacidad de músculo y el tejido miofascial para contraerse y relajarse con normalidad. Si el problema se cronifica se produce la aparición generalizada de los denominados “puntos gatillo”, que generan dolor puntual e irradiado,  proceso inflamatorio, pérdida de movilidad y fuerza, disminución del riesgo sanguíneo, acidosis metabólica…etc. 

Un estudio publicado en la Revista Reumatología Clínica indica que los puntos gatillo miofasciales son los responsables del dolor en un 30% de los pacientes que acuden a un médico de atención primaria, en un 20% los que acuden a un reumatólogo y sorprendentemente en un 85-93% los que acuden a centros especializados o unidades del dolor.

 Soluciones Instituto Salud y Calidad de Vida (INSACAVI)

Teniendo en cuenta que la FM es una enfermedad con más de una causa y años de evolución, consideramos necesario el abordaje integral por parte de profesionales universitarios graduados en sus respectivas áreas de conocimiento (fisioterapeutas, médicos, nutricionistas, etc) , que además cuenten con experiencia clínica suficiente para ayudar a estas personas a disfrutar de una vida más plena y feliz.

Desde nuestra humilde opinión consideramos que nunca debe faltar la práctica regular de ejercicio físico adaptado a las necesidades y condición física del paciente. Por otro lado, teniendo en cuenta la relación directa entre FM, ansiedad y depresión, se hace necesario ayudar en la gestionar diaria de las emociones. De esta forma conseguiremos disminuir en gran medida el estrés asociado a esta enfermedad. No podemos olvidar la importancia de una alimentación saludable que ayude a detoxificar/limpiar el organismo y facilite el buen funcionamiento bioquímico. Finalmente teniendo en cuenta la relación entre dolor generalizado y síndrome miofascial, es muy recomendable acudir a profesionales expertos en terapia manual graduados en Fisioterapia, que ayuden recuperar la movilidad a los músculos, tejidos y vísceras que se han vuelta hipomóviles, rígidos y tensos.